Este lunes 17 de febrero -en el marco de la primera reunión de Consejo Directivo y Socios de CaCEC- el Ministro de Ciencia y Tecnología, Pablo De Chiara; el Rector de la Universidad Nacional de Córdoba, Hugo Juri y el presidente de la Agencia Innovar y Emprender, Diego Casali fueron invitados a compartir su experiencia luego de la Misión a Israel realizada en enero. 

Marcelo Olmedo, Presidente de nuestra Entidad dio la bienvenida a los presentes y agradeció muy especialmente la disposición del destacado panel de aceptar la convocatoria de CaCEC al tiempo que expresó: “ojalá que esta reunión sea el puntapié para trabajar en conjunto en proyectos en el que estemos todos incluidos”.

El panel fue moderado por Ana Sturam, Directora de nuestra Entidad, quien realizó una introducción acerca de las claves del éxito de la industria tecnológica y lo que representa en la economía de ese país: “Son tres los factores claves que llevaron a Israel a ser la potencia tecnológica que es hoy: el servicio militar obligatorio tanto para hombres – 3 años-  como para mujeres – 2 años- que les enseña a manejar grupos, tomar decisiones, capacitación y estudio; luego, Israel  no piensa en su mercado interno,  es Estado con pocos habitantes – 9 millones-,  se prepara siempre para el mercado externo y el último componente es la conformación de un ecosistema emprendedor formado por el sector público, el privado y el académico y cómo interactúan: el sector privado es el que apoya con inversiones,  el sector público o Gobierno facilita con las habilitaciones para las empresas y el sector académico aporta talento y conocimiento (“Triple hélice”).

Israel tiene un gasto en educación de 2000 Euros per cápita y Argentina tiene un gasto de 644 Euros, eso nos está dando una pauta más de que Israel apuesta al  conocimiento para lograr el crecimiento”. 

Por su parte, el rector Hugo Juri destacó que el viaje “fue una experiencia largamente esperada. Recuerdo que hace un tiempo invitamos a nuestra Universidad a Shimon Peres quien sin duda tuvo mucho que ver con el desarrollo en estas últimas décadas de Israel con su dinamismo, simbolismo, su fuerza y con su mirada hacia el futuro que ya la tenía en aquella época. La importancia de este viaje radica en que entre todos pudimos observar esta llamada “Triple hélice” - que comentó Ana Sturam-. 

Las posibilidades de trabajar en conjunto para capacitar los recursos humanos con el área académica, científico-tecnológica y los emprendedores, son posibles, "estamos en condiciones de formar alianzas estratégicas que sean muy beneficiosas para nosotros y para nuestros socios extranjeros. Debemos abrir la mente y trabajar en serio, porque en Argentina, el 80 por ciento del desarrollo científico tecnológico se hace en las grandes universidades públicas”. 

¿Cómo se puede aplicar desde la Universidad?: “en la Facultad de Matemática, Astronomía y Física – FAMAF, contamos con recursos humanos especializados en informática de alto rendimiento. En Córdoba se han dado las diferentes variables que hacen falta para crear un ambiente en la cual podamos tener una asociación y ganemos ambos, en este caso por ejemplo  con la Universidad de Haifa y UNC, principalmente porque contamos con los recursos humanos, las ganas y tenemos un Estado amigable que hace lo posible para resolverlo”. 

La visión del Estado la aportó Pablo De Chiara, quien dijo sentirse muy orgulloso de haber podido organizar esta Misión “que tuvimos el enorme placer de poder compartirla no solamente con otros miembros del Gabinete Provincial, sino también con el rector de la UNC y con el decano de la Universidad Tecnológica Nacional- Regional Córdoba y un grupo de empresarios que de alguna manera también pudieron darle el marco perfecto y que dejó una gran impresión en cada uno de lugares donde fuimos recibidos: universidades,  un centro de investigación, un centro de transferencia tecnológica y por supuesto emprendedores y empresas”.

Sin duda, “desde el nacimiento como Estado de Israel hace comprender cómo su espíritu emprendedor nace a través de las necesidades que fueron enfrentando, no solamente por sus vecinos sino también por su contexto territorial”, remarcó.  

Datos: Israel es un país de casi 9 millones de habitantes de los cuales el 10 por ciento trabaja en empresas de alta tecnología, que genera el 13% del PBI y el 40% de las exportaciones: "ésa es la clave, son alrededor de unos 45 mil millones de dólares, lo que se exporta en hi-tech. El sueldo promedio es de unos 3500 dólares, pero en hi- tech es 7000 dólares". 

Comentó que en cuanto a los recursos humanos, tiene un déficit crónico de 15.000 ingenieros y cada vez más empresas multinacionales instalan su centro de I+D en ese país. La mayoría de las empresas tecnológicas del mundo tienen su Centro de innovación en Israel, “con lo cual están enfrentando un problema grave porque ellos tienen calculado que por cada puesto que genera una empresa local, que desarrolla un producto innovador de alta tecnología, genera dos puestos de trabajo en la industria local de servicios que tengan que ver con apoyo: contables, legales; por cada empleo en una multinacional de I+D genera un tercio de puestos de trabajo indirecto”.  

“Invierten el 4,25 por ciento de su PBI en innovación; Argentina el 0,56; 1,3 por ciento Brasil. Tiene una política de Estado que lleva 70 años de desarrollo trabajando en innovación. Ese es el concepto sobre la cual se instala el ecosistema innovador y el otro es el ejército en el que los estudiantes se capacitan en carreras que tienen que ver con la tecnología.  

Otro factor muy positivo -destaca- es "la gran inversión en cuanto a  patentar el conocimiento, buscarle la forma de generar un negocio a través de cada una de las cosas. Ven la habilidad de convertir la invención en “invoices” (facturación), pero sin olvidar que es muy importante la patente pero lo más importante es seguir trabajando en correrse cada vez más de las barreras tecnológicas". 

La combinación de una cultura innovadora, la de una política de Estado, la de la sinergia que produce el Ejército con las startups, la creación de éstas a través del Ejército, de la misma demanda que tiene el Estado, se consigue financiamiento y eso puede producir una empresa y así van creciendo, logrando el éxito más importante que ha tenido el mundo. 

Israel es el usuario de la propia tecnología que produce y eso es muy importante porque eso aceleran los procesos de innovación, “cuando uno es usuario de su propia tecnología desarrolla una cercanía muy grande con la aplicabilidad de la solución”, dice. 

Otro aspecto que destaca y que es claramente un diferenciador  “es la coherencia discursiva: todo el mundo en Israel habla de lo mismo y lo cuenta de la misma forma: la idea de Startup Nation, de las 6000 startup, de las 300 multinacionales I+D, de la inversión de Israel en términos de innovación y desarrollo. Parte de ese aprendizaje es el que capitalizamos”. 

“Hemos logrado algunos avances muy importantes en relaciones que vamos a seguir cultivando de ahora en adelante. Tenemos este vista acciones para poder llevar adelante con Israel; valoran mucho el conocimiento que se produce en Argentina y en Córdoba en particular”. 

Coincidiendo con el Dr. Juri, De Chiara cree que no falta nada, que en Córdoba hay conocimiento absoluto de la tecnología que existe en Israel y existe gran “potencial para hacerlo, lo único que nos falta es transmitir esa potencia al piso”.

Diego Casali, por su parte remarca su misión de “bajar” la experiencia de Israel y  trazar acciones para empezar a moverse rápidamente y cuáles ya vienen haciéndolo en Córdoba desde hace unos años. 

Recalca que “la riqueza de este tipo de misiones es única y la confluencia de los sectores privado, académico y público haciendo en unos días una inmersión acelerada en el ecosistema tecnológico como el de Israel, tan disruptivo e innovador es fantástico”.

Recuerda cuando en el 2015, Córdoba no tenía una Agencia de Innovación y hoy es una realidad. También refiere el año 2001 cuando el Gobierno de Córdoba vio como algo muy positivo y estratégico que se instalaran empresas multinacionales, que para muchos representaban una amenaza: “cuando lo vemos a 19 años, el valor agregado y la generación de puestos de trabajo fue enorme: Córdoba tiene un ecosistema tecnológico de cerca de 500 empresas - en ese momento era un puñadito de 20/30 empresas de tecnología, había 300 personas trabajando y hoy cerca de 15000 personas. Esa visión estratégica de abrirnos, de traer jugadores de primer nivel realmente le levantó la vara al ecosistema y hoy Córdoba es un jugador regional muy fuerte”, destacó.

Refiere que en 2004 se promulgó la Ley de Promoción de la Industria del Software,  eso también fue un hito que favoreció muchísimo a la creación de nuevas compañías,  a la generación de puestos de trabajo de valor, a la apertura de mercados en el exterior. 

“Hoy, la Ley de Economía del Conocimiento es superadora y más allá del software incluye otros sectores para apoyarlos vinculados a la economía y el conocimiento,  que es lo que Israel desde hace muchos años viene con políticas de estado apoyando y trabajando fuertemente. Vamos a tener a nivel nacional una ley que al software lo ayudó muchísimo y somos totalmente positivos y estamos seguros de que va a favorecer a otros sectores de la misma manera”. 

Sin embargo cuestiona la escasez del talento, “el sector del software tiene la tasa de crecimiento cercana al 15% anual desde hace muchos años y podría ser mayor si existieran más recursos calificados en Córdoba”. 

Debemos pensar en la formación en capacidades y habilidades y no solamente en carreras de 5 y 6 años. Los jóvenes cada vez buscan formación y articulación laboral con trayectos cortos y es lo que el sector privado está demandando. 

Más allá de los cambios en los gobiernos, se ha mantenido el apoyo al sector del conocimiento y ahora se redobla con esta nueva ley. La Agencia tiene varios programas al respecto. “Es imprescindible la innovación en cualquier tipo de compañía, realmente hay suficientes casos en las que empresas líderes indiscutidas,  que por quedarse en su estado de confort,  fueron superadas por emprendedores que crecieron en un garaje y en poco tiempo voltearon a líderes de distintos segmentos. 

Este es un partido que tenemos que jugar y jugar fuerte. Coincido en que tenemos un nivel de capital humano altísimo, debemos estar más cerca, en la misma mesa buscando que están haciendo todos esos investigadores”, finalizó. 

Luego de esta última exposición se generó un espacio de consulta por parte de los presentes. 

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